Comprar y reformar una vivienda de segunda mano: ¿Qué tener en cuenta?

25 agosto, 2022

Comprar y reformar una vivienda de segunda mano puede ser emocionante. El proyecto de construir tu nuevo hogar es una tarea que requiere de paciencia y energía. La mayor parte de los edificios de uso residencial tienen más de 40 años, por lo que la gran mayoría de viviendas de segunda mano a la venta en el mercado requieren de reformas, en mayor o menor medida. Si ya has descartado comprar una casa nueva puede que en el amplio parqué de viviendas para reformar encuentres tu nuevo hogar.

¿Qué tener en cuenta? Existen muchas variables importantes a la hora de decidir qué vivienda comprar, si el precio es el adecuado o cuánto costará afrontar la reforma que necesita tu nuevo hogar. Además de estas cuestiones, son esenciales otras, como el estado de la estructura, la eficiencia energética o el precio del metro cuadrado en la zona que más te interesa.

Comprar una vivienda de segunda mano

Lo primero es empezar por localizar las zonas de tu interés y buscar viviendas que se adapten a tus necesidades tanto en el mercado de segunda mano como en el de viviendas de nueva construcción. Esta primera investigación te ayudará a hacerte una idea de la variedad de opciones y precios.

Una vez tengas claro tu presupuesto puedes comenzar a afinar la búsqueda entre las viviendas de segunda mano. Dentro de las opciones disponibles encontrarás inmuebles que precisen de una reforma más o menos intensa. No debes olvidar los gastos asociados a la compra de una vivienda, ya que si no revisas todos los detalles, puede que el presupuesto soñado se quede muy lejos de lo que realmente tienes que pagar. Desde los impuestos o la notaría, hasta la posible participación de una inmobiliaria, constructora o contratista.

 

Comprar y reformar una vivienda de segunda mano: ¿Qué tener en cuenta?

Reformar una vivienda de segunda mano

Si ya has encontrado tu nuevo hogar, puedes iniciar el proceso de reforma de tu vivienda de segunda mano. Los expertos recomiendan contar con al menos tres presupuestos de empresas de reforma. Este detalle te ayudará a valorar cómo quieres enfrentar la reforma, pero también a buscar la mejor relación calidad/precio. Aun así, debes tener en cuenta algunas cuestiones.

Valora el estado de tu nueva casa

Reformar una vivienda de segunda mano contando con los servicios de un arquitecto que pueda valorar el estado del inmueble, puede salvarte de problemas en el futuro. Ante cualquier signo de humedad o detalles estructurales, es importante contar con los ojos de un especialista que pueda valorar el estado del inmueble. En ocasiones, puedes encontrar una vivienda de segunda mano que en apariencia esté como nueva, pero no olvides que una mano de pintura en el momento correcto puede ser engañosa a la vista.

Instalaciones de luz, agua y gas en tu nuevo hogar

A la hora de reformar una vivienda de segunda mano debes valorar los suministros. Este tipo de instalaciones, sobre todo en los inmuebles para reformar de segunda mano, son casi tan importantes como la estructura. Un problema en el sistema de agua, por ejemplo, puede suponer el cambio completo de las tuberías de la vivienda. La mayoría de las viviendas de segunda mano de uso residencial son anteriores a 1980, por lo que, en muchos casos, significa que las tuberías son de plomo, un material que se deteriora con el tiempo. A partir de 1960 comenzaron a construirse viviendas con sistemas de distribución de agua en hierro y cobre. Revisar el estado de las mismas y valorar la opción de cambiar el sistema de cañerías puede marcar la diferencia, tanto a la hora del presupuesto como en la duración de la obra de reforma.

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Permisos de obra para la reforma de tu vivienda de segunda mano

Cualquier reforma de una vivienda de segunda mano, por pequeña que sea, puede requerir de un permiso de obra. Es importante que cuentes con los permisos, o bien, que confíes en la empresa contratista que hayas seleccionado para gestionar todos los trámites.

Empieza la reforma de tu vivienda de segunda mano por el baño y la cocina

Lo habitual en las reformas de viviendas de segunda mano es comenzar por el baño y la cocina. Teniendo en cuenta que el precio por metro cuadrado en reforma suele rondar entre los 500€ y 700€ es importante prestar máxima atención a dos zonas tan fundamentales en la casa. Tuberías, suministro de gas, griferías, suelos y acabados que te permitirán disfrutar de tu nuevo hogar. No descartes dedicar más presupuesto a estas zonas de la casa para conseguir el resultado que buscas.

Otros detalles a tener en cuenta para la reforma de un inmueble de segunda mano

La situación actual y la falta de suelo para construir nuevas viviendas en algunas áreas urbanas, afecta de forma directa a la cantidad de inmuebles para reformar. La mayoría de empresas contratistas dedicadas a la reforma tienen lista de espera de más de seis meses. Otros aspectos afectan también, por ejemplo, al coste de los materiales e incluso al stock disponible, por lo que es importante marcar un plazo lógico en tu calendario, dejando espacio para los retrasos e imprevistos.

 

Comprar y reformar una vivienda de segunda mano: ¿Qué tener en cuenta?

Aumenta el valor de tu nueva vivienda reformada

El típico “ya que estamos” siempre está presente en los proyectos de reforma de viviendas de segunda mano. Esas ideas de última hora que hacen que todo se retrase, pero que afectarán de forma directa a la calidad de vida en tu nuevo hogar. Algunas de ellas aumentarán el valor de tu inversión inicial.

Tienes soluciones tan interesantes para aumentar el valor de tu vivienda reformada como las cortinas de cristal, pensadas para proteger tu terraza, reducir el ruido exterior o incidir en la eficiencia energética de tu hogar. Con una instalación sin necesidad de obra, puede ser la guinda final para aportar el máximo valor a tu nueva vivienda. Una inversión económica reducida, comparada con el resto de trabajos a realizar, pero que puede aumentar el valor del inmueble hasta en un 2% según los estudios realizados en diferentes capitales europeas.

Otras cuestiones, como la calidad de los materiales que selecciones, o la calidad de los acabados, potenciarán no sólo tu bienestar y el de tu familia en el nuevo hogar, sino que incidirán de forma directa en un posible cambio de domicilio en el futuro, sabiendo que tu inversión puede ser más que interesante.

 

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