Las terrazas verdes son pequeños pulmones para las zonas urbanas. Contribuir al medio ambiente dotando a las terrazas de un amplio jardín o huerto urbano, es una apuesta por la sostenibilidad.
¿Qué beneficios aportan las plantas? Las plantas aportan beneficios como el consumo de C02 y la creación de oxígeno. Además, las plantas ayudan a generar humedad en el ambiente y el desarrollo de la jardinería o el cuidado de un pequeño huerto reduce de forma significativa los niveles de estrés.
Diseñar terrazas verdes desde el principio
Lo ideal para diseñar terrazas verdes y conseguir los mejores resultados es tomar medidas de tu terraza y analizar las posibles mejoras para que sea el lugar ideal para tu nuevo jardín.
Toma medidas para crear el espacio natural perfecto
Lo primero es comenzar por las medidas. Además del suelo, no olvides medir las paredes o tener en cuenta el techo (si dispones de él). Cada terraza es un mundo y es fundamental saber cuánto espacio disponible existe realmente para tu nuevo jardín. Si quieres combinar tu espacio verde con alguna otra actividad, no dudes en pensar detenidamente teniendo en cuenta las medidas que has tomado, para que todo quepa perfecto.
Terrazas verdes: climatología y orientación
Tanto el clima como la orientación determinan las terrazas verdes, puesto que no es lo mismo crear un espacio natural en climas cálidos y secos, que en zonas más húmedas y frías. Del mismo modo, la orientación de tu terraza determinará qué cantidad de luz recibe tu terraza a lo largo del día, otra de las cuestiones fundamentales para mantener tu nuevo jardín o huerto en las mejores condiciones.
Reforma tu terraza
La creación de una zona verde en tu terraza es una oportunidad genial para decidirte por reformarla. Dentro de las instalaciones sin necesidad de obra puedes encontrar soluciones ideales para proteger tu futuro jardín del impacto del viento o de la intensidad del sol. Las cortinas de cristal te permiten crear un espacio protegido para tu nueva zona verde, pero al mismo tiempo mantienes la esencia de tu terraza gracias a su sistema de apertura y cierre. Sí, además, incorporas estores solares, conseguirás regular la cantidad de luz de forma sencilla, evitando así plantas secas. Puedes cerrar tu terraza con cortinas de cristal gastando poco dinero.
Terrazas verdes: el suelo
Las terrazas verdes deben contar con un suelo eficiente que no permita la creación de charcos que antes o después pueden crear humedades a los vecinos. El agua puede jugar malas pasadas y tu jardín debe ser regado, por lo que pararte ahora a revisar el suelo, puede ser mejor que esperar a que aparezcan los problemas. Además, puedes generar distintos espacios colocando césped artificial en toda la extensión de la terraza, o jugando con otro tipo de suelo de vinilo exterior imitando la madera o la tierra. Combinar el verde de las plantas con los tonos marrones de la tierra y los troncos siempre da buenos resultados. Decidir qué tipo de suelo poner en la terraza te ayudará a crear un espacio natural perfecto.
Terrazas verdes con mucho estilo
Una vez tienes clara la base, las terrazas verdes se hacen realidad en poco tiempo. Sin embargo, te quedan muchas decisiones por tomar antes de ver tu sueño hecho realidad. Puedes optar por un enfoque más directo comprando las plantas de los tamaños exactos, o bien, puedes crear con mimo y mucha paciencia tus propias variedades.
Jardines japoneses
Dentro de la variedad de estilos de las terrazas verdes, los jardines japoneses nunca pasan de moda. Sus líneas elegantes y ordenadas aplicando el feng shui y la incorporación de circuitos o fuentes de agua, crean lugares pensados para meditar y disfrutar de la tranquilidad. El bambú común o el ave del paraíso son plantas representativas de este tipo de jardín, junto a bonsáis de distintas variedades como el cerezo, el enebro o el arce, musgos o camelias. Este tipo de jardín se adapta mejor a climas húmedos que secos.
Cactus y suculentas en terrazas verdes
La belleza de las terrazas verdes también está en la selección de plantas. Los cactus y las suculentas cuentan con una gran variedad de colores y formas. Además, requieren de poca agua, por lo que son ideales para personas que necesitan crear un espacio natural en casa, pero no cuentan con demasiado tiempo para cuidarlo. Puedes encontrar cactus con o sin espinas, colgantes o repletos de flores de colores. Investiga las diferentes variantes para crear tu jardín perfecto.
Un jardín clásico en tu terraza
Aunque la extensión de tu terraza determinará si puedes crear un jardín clásico, es importante pensar en la forma de organizar las macetas, ordenarlas por alturas y aprovechas los huecos para colocar las que más puedan sufrir al sol. Los jardines clásicos son siempre buena idea, ya que sus formas geométricas y ordenadas aportan serenidad y control. El césped artificial junto a maceteros con hortensias, caléndulas, alegrías o begonias. Las flores siempre aportan alegría, pero es preciso abonarlas y cuidarlas correctamente, así como distribuirlas en función de sus necesidades de luz solar.
Terrazas verdes mediterráneas
Las terrazas verdes mediterráneas son jardines secos que incorporan plantas que soportan bien el alto impacto de la luz solar y la falta de agua, así como los vientos más secos. Puedes incorporar a este tipo de jardín macetas con plantas trepadoras como la buganvilla o el jazmín, pero también optar por las aromáticas como el tomillo o el romero. Si lo tuyo son las flores puedes decidirte por caléndulas, geranios y rosas.
Tu nuevo lugar favorito de la casa
Una vez hayas decidido el estilo que quieres imprimir a tu nuevo jardín, ha llegado el momento de ponerse manos a la obra. Puedes crear tu propio semillero e ir comprando macetas poco a poco, pero también puedes dedicarte por comprar plantas ya cultivadas y empezar desde el punto óptimo.
Mobiliario para terrazas verdes
El mobiliario para terrazas verdes debe centrarse sobre todo en espacios de almacenaje para poder guardar todas las herramientas que necesitarás para mantener tu jardín cuidado. Opta siempre por muebles de exterior que no solo te permitan almacenar, sino también contar con una base sobre la que trabajar trasplantando, podando o sembrando nuevas macetas. Hazte a la idea de que siempre debes tener a mano como mínimo unas tijeras de podar, una regadera, algunas macetas sueltas y herramientas para cavar, sin olvidar abonos, mantillo y guantes de trabajo. Puedes añadir espacios para sentarse u otro mobiliario en función de tus necesidades y de los metros cuadrados disponibles. De hecho, el cambio del suelo puede ayudarte a generar diferentes espacios, aunque te recomendamos optar por una terraza totalmente verde.
Maceteros para todos los gustos
Desde bancales grandes a maceteros colgantes, pasando por pequeños arriates. El mundo de las macetas es inmenso. Cada tipo de jardín necesita un tipo de macetero, por lo que puedes seleccionar entre numerosas tonalidades. No olvides contar con platos o bandejas inferiores que eviten que el agua se desperdicie. No solo ayudarán a la planta, también te evitarán de problemas de humedades.
Riego por goteo para terrazas verdes
Siempre y cuando las terrazas verdes cuentan con tomas de agua, es posible articular un sistema de riego por goteo. Esta forma de riego no solo te permitirá ahorrar en agua, además no tendrás que preocuparte en exceso por el cuidado de tu nuevo espacio natural. Puedes comprar un sistema de riego por goteo para instalar directamente o puedes crear el tuyo desde cero. Si en tu terraza no hay toma de agua y resulta complicado, siempre puedes optar por los diferentes surtidores disponibles en el mercado o incluso, crear tu propio sistema individual utilizando una botella vacía, un palo para clavar en la tierra de la maceta y un tornillo para introducir en el tampón. Al colocarla bocabajo conseguirás que las gotas vayan cayendo poco a poco. Eso sí, no te olvides de rellenar los botes cada cierto tiempo para mantener tu terraza en las mejores condiciones.
